lunes, 24 de mayo de 2010

Una cena cotidiana

La cena se enfriaba en la mesa. Mi mente se nublo, y te hablé como si no estuviese. Pero ¿Por qué? Dije arrastrando las palabras como lagrimas. Me miraste pálida y con un gesto céreo dijiste –no hay porqués, simplemente se acabo-. Apoyaste tu mano sobre las maletas en el último gesto que recuerdo de ti. De eso hace dos meses. O eso creo. La cena ya esta fría en la mesa.






Te dan la frase en cursiva y haz un cuento, menos de 100 palabras

No hay comentarios:

Publicar un comentario