lunes, 17 de mayo de 2010

Dolor

Hoy es un día triste. Y no tengo como explicártelo. Tú que tuviste que esconderte cuando dieron el golpe de estado. Tú que fuiste preso, que tuviste que dejar a tu familia, tu vida, tú que tuviste que hacer trabajos forzados, tú que viste como cada mañana descerrajaban un tiro en la cabeza de uno de los presos al grito en "¡esta es la justicia de Franco¡", tú que fuiste culpado por presentarte a una lista electoral bajo las siglas de un partido democrático, tú que perdiste la libertad, tú que perdiste tu tiempo. Abuelo, no me preguntes hoy ¿porque? ¿porque no pueden buscar sus restos?, ¿porque es delito querer saber la verdad?, ¿porque existe tanta maldad?. No tengo respuesta y no se que pensar. Solo pena. Ni siquiera indignación me queda ya, solo una profunda y dolorosa pena porque sea delito querer saber la verdad. Seguirán creciendo cardos de dolor en nuestras cunetas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario