miércoles, 17 de marzo de 2010

De pies y manos

Vivimos en un sistema que nos ata de pies y manos. Un sistema invisible que nos desmotiva a base de una total despolitizacion por parte de los partidos políticos dependientes de las empresas y del miedo infundido por el terrorista que puede ser el vecino. Esto anula o minimiza nuestra capacidad de asociación, de reunión. Derechos fundamentales por los que se lucho contra el franquismo y que ahora no somos capaces o no sabemos usar. Miedo del vecino y sensación de que gobierne quien gobierne nada va a cambiar. Estamos donde nos quieren. En el Gran Hermano de George Orwell, desprovistos de cualquier capacidad de acción, minusvaloramos nuestro poder y de esa forma lo inutilizamos, perpetuando este "sistema de somnolencia".

¿que hacer? todas estas dudas se me presentaban hoy cuando me afiliaba a Amnistía Internacional. No soy muy partidario de las Ong´s y hasta hoy solo he colaborado con ellas en casos particulares como Haiti, Chile. Lo que me perturba de la Ong es su carácter de subcontrata (sin animo de lucro) del estado. El estado elegido democráticamente, delega parte de su misión de apoyo a países en vías en desarrollo, a países que han sufrido catástrofes, a países sometidos a violaciones de los derechos humanos, en las Ong.

De esta forma este maremagnum de asociaciones ocupan nichos que desde mi punto de vista los debería tener copados un estado eficiente. Así en vez de profesionales especializados y remunerados dependientes del conjunto de la sociedad, tenemos voluntarios supeditados a una "empresa" sin remuneración y en ocasiones sin formación.

De este modo, el dinero que tendría que provenir de una recaudación progresiva (quien mas tenga mas pague) para distribuirlo entre la gente mas pobre bajo el control de los gobernantes votados por sufragio (con su sistema legislativo, judicial y ejecutivo detrás), proviene de la voluntad individual de las personas y es repartido por dichas "empresas" bajo la "supervisión" de la administración.

Ocurre que el sistema de las ONG es muchas veces monetario, dinero para problemas con los niños soldado de Sierra Leona, dinero para la pobreza de Ruanda..dinero...pero no todos los problemas se resuelven con dinero, o por lo menos no con el dinero directamente. Muchos problemas son políticos, ideológicos...la mayoría de las desigualdades de este mundo no se debe a la ausencia de recursos (Fijense en Bolivia plagada de Gas Natural y Petróleo, en el Congo llena de diamantes, en Irak llena de petróleo), sino a la distribución o apropiación que hacen de esta gobernantes y empresarios. Estas ONG se declaran apolíticas, pero luego (en su gran mayoría) recaudan dinero de estados (¿como van a criticar a ese estado?) o de empresas (¿como van a criticar a esa empresa?). De esta forma, los causantes del mal, lavan sus conciencias con su misera caridad a ONG´s. Repsol esquilma el petróleo de Bolivia a bajo coste y luego dona una cantidad a Unicef...Cuando hablas con las ONG´s se niegan a tratar temas políticos que son el transfondo de los problemas. De poco vale que le den leche a España si sigue Franco, de poco vale el azucar a Chile si sigue Pinochet, de poco vale el dinero para Marruecos si continua su Rey.

¿pero que hacer? ¿quedarse en casa escribiendo párrafos al aire?

Amnistía Internacional no acepta subvenciones de ningún estado, ni dinero de partidos políticos, ni de empresas. Es lo que se llama independencia. AI critica problemas de base, sociales, de libertad de conciencia, denuncia empresas, presidentes, partidos, actos...es un comienzo. Hay que luchar para cambiar este sistema, y a parte de recursos, hace falta una BUENA distribución de los recursos existentes y una denuncia clara y ciudadana de los ladrones y cómplices de robar recursos, vulnerar libertades, vejar derechos humanos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario